jueves, 5 de junio de 2008

.planes de un día cansado

Ya... los días parecen cansarse, agotarse de mi peso en la ciudad. Hoy tengo nomás una mañana gastada para regalar al día, una mañana de café con leche tardío, besos pegoteados de una niña con rulitos y las palabras de esa gente que me enamora a distancia.
Nada más. Esta hemiplegia del tiempo abre los cajones llenos de polvo y me busca, me obliga a ciertas costumbres, a ciertos hábitos que creí había perdido.
Este día no me invita a salir a la calle y sin embargo paso, camino, me cuelgo de las esquinas llenas de bultos verdes y cabezas asomando de esos bultos, que cada vez se me van haciendo más familiares. Cruzo parques, escuelas, oficinas, sin rumbo cierto, aspirando ese olor característico de la casita de todos, de los sintecho.
Avanzo con confesiones, fantasmas y el peso de los suburbios acorralándome hacia la noche. Paso, camino, muero a la tarde cuando el cielo sube, ya limpio, y se desespereza entre las ruinas que circundan el Palacio.
Anoto en mi libretita. Planeo el chocolate caliente y los besos de rigor.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

'sigues pareciendo la chica más triste de la ciudad'
excelente, hermani, como siempre..
un gusto que jor se sume a esto
y se viene ese cassette (:
beso grandote

Eclipse dijo...

ufffff!! no podes dejarme esa fraseee!!
sos lo más sis.
se viene con todo el cassette!! espero tenerlo este finde, faltan unos retoques y ponerme las pilas con el código.